Una revisión general

¿Alguna vez tuviste problemas con tu Windows? ¿Pensaste en dejar esta plataforma y sumarte a los usuarios de Mac o Linux? Déjame comentarte, no fuiste el único. Yo, personalmente, sentí varias veces esto.

Sin embargo, no podía dejar a Windows, por una simple razón: programo en los lenguajes proporcionados por Microsoft. No sólo eso: soy estudiante universitario de computación, y la programación es la herramienta más importante de ella. Por ende, no podía alejarme, así más quisiera.

En ese entonces trabajaba bajo Windows XP, el sistema más usado hasta hoy –cuestión que personalmente no estoy de acuerdo-. Mi computadora no era muy rápida –256 MB de RAM, 880 MGH de procesador, 8 MB de vídeo-, y el XP parecía hundirla más. Siempre tuve buenos resultados con Windows 2000, y me apenaba que XP sea otra historia.

Pero el tiempo pasó y pude adquirir otra computadora, una mucho más rápida. Esta vez, la computadora tenía Windows Vista, un sistema que fue muy criticado. Al usarlo, me di cuenta que muchas críticas que le hacían al sistema eran exageradas. Una de ellas –que todo es “diferente”- me hacían reírme a lo bajo. ¿Todo es diferente? Lo mismo dijeron de Windows XP, y mira la aceptación mundial que tiene. Sin embargo, una crítica que yo sí compartí era que consumía demasiados recursos.

Me apenaba, por otro lado, que cuando adquirí el nuevo equipo se acercaba el lanzamiento de Windows 7, y no iba a poder tenerlo. Quién sabe, me dije, tal vez no será bueno.

Pero con el paso del tiempo, vi que increíblemente, un Windows desde su etapa beta tenía buenas críticas. Y cuando salió Windows 7 RTM, no pude aguantar más.

Descargué el Windows 7 y lo instalé. Por supuesto, eso supuso perder mi licencia original de Windows Vista. Eso lamenté, porque apenas usé el Windows noté que tenía sólo 30 días para activarlo. Y no iba a pagar por una nueva licencia de Windows.

Por ende, tuve que activarlo de otras maneras; maneras que luego publicaré. Pero al usar Windows 7, me encontré con algo nuevo. Algo bastante bueno, aunque con algunas fallas. Windows 7 promete mucho más que Vista, y es el Windows que más me ha agradado hasta el momento.